ALGUNAS OPINIONES SOBRE NUESTRO VAMPIRO (desde una butaca de cemento)

Estimados Tita, Edward y Jean:

Estoy impresionado por la atención que dan los niños a la obra. Ello se debe sin ninguna duda al talento de los actores que logran convencerse de sus roles, y trasmitir tal convencimiento a los asistentes. Pero cuando se trata de niños, me quito el sombrero, porque es el público más disperso, con todo derecho. Si la obra no ha sido pensada en niños, y capta su atención, es que estamos utilizando el lenguaje correcto: el de los cuerpos, el de los gestos, el de las palabras y sus tonos adecuados, y en este caso, exagerando porque se trata de una comedia.

Hay algunos silencios innecesarios, y hay algunas pausas que no se tienen en cuenta. Esto ocurre en especial con Edwar, que aunque es muy notoria su transformación en Zoylo y es muy buena su actuación, a veces no tiene en cuenta que le está contando una historia al público.

El éxito de una obra de teatro, quizá de todas las cosas, depende siempre no tanto del talento y la habilidad que se ponga en el trabajo, sino de la persistencia que se tenga para vencer los obstáculos, y seguir, convencidos de que estamos ofreciendo una reproducción justa de la realidad.

El primer movimiento de los actores, antes de la actuación, debe ser verificar si todo está en su lugar. Diseñar el espacio mentalmente, o mejor dicho, rediseñarlo, porque nuestro escenario hoy puede ser un gran teatro, una losa deportiva, un salón cualquiera, y mañana la esquina de una calle. Tenemos una línea neutra, que en realidad de neutra no tiene nada porque desde esta línea se propicia el espectáculo, emanan los movimientos.

¡Dios! Qué expresiva es la escena donde la Iglesia bendice el descuartizamiento de Zoylo. Sí pues, más de una vez la cúpula clerical ha bendecido armas asesinas. El sonido de una campanita puede redondear el cuadro, si no podemos ponerle incienso también.

El remate final sigue mereciendo mejor tratamiento. Le quitaría esa música melancólica que acompaña los momentos finales de Zoylo, para dar lugar al silencio, la escena de por si es muy expresiva, y lo que dice tan triste que no necesita más. Pero en cuanto decide arrojar el cuchillo, y romper el contrato, allí sí que es necesario subrayar tal decisión. Le vendría bien una música muy afirmativa, que además anteceda y subraye su enfrentamiento con los vampiros más directos. Pienso en Bach. La escena es más lenta, si tuviéramos ocasión de presentarla con cortaluces sería excelente. Mientras tanto, podemos mostrar -digamos así- unas 20 fotos que se suceden hasta la caída de los vampiros, y el triunfo de lo auténtico.

La canción final debe ser cantada en público, porque se nota la mímica. Y gustar más de la música y el ritmo, a la manera de los jóvenes cantantes de hip hop de las esquinas urbanas del Callao. Esos personajes todavía no están bien dibujados, y la salida final debe ser dándole espalda al público, congelando la salida, o quizá sería mejor buscar el perfil, pero no el frente. A menos que sea para saludar al publico

La ambiguedad no es buena compañera. A veces puede parecer muy divertida, pero por lo general por ley fisica, todo cuerpo reclama ser lo que es, busca su más profunda autenticidad. Cuánto tiempo demore, no sabemos, pero lo verdadero termina por revelarse, y ejerce su dominio a pesar de los que cultivan el oscurantismo.

A. Mego

4 DE MAYO, 2009

Sigo recibiendo saludos y expresiones de gran satisfacción por la presentación de la obra en los miércoles culturales del Gremio de Escritores del Perú. Hemos tenido a un público de primera, porque la mayoría de asistentes era o poeta, o escritor, o pintor, artistas todos, y ¡para que les guste algo a los artistas…! No conozco público más exigente, más difícil.

He llegado a una conclusión que a veces me hace dudar sobre la continuidad de nuestro proyecto. Hacía mucho tiempo que yo no estaba al tanto de lo que acontecía en la UNI , a pesar que hace más de dos años estoy muy cerca, en Piñonate. Si no me invitaban al TUNI, no me enteraba que a la Universidad de Ingeniería la han convertido en un colegio. Menudo trabajo que debe cumplir la parte más conciente de la UNI para devolverle su carácter de UNIVERSIDAD. Sigo pensando que lo mejor de la UNI no son sus profesores, sino la gran masa de jóvenes brillantes que ingresan y apuestan por el futuro desde la ciencia y la tecnología.

He encontrado la música que puede acompañar la lucha de Zoylo con los cuchilleros. Es una versión rockera de una breve pieza de Bach. Me gustaría que la escuche Edwar. Me imagino un enfrentamiento estilizado, casi en cámara lenta, donde a veces es afectado Zoylo, pero los vampiros también se llevan buenos golpes, hasta que el acuerdo de los vampiros es derrotado por la fortaleza de nuestro héroe.

Todo tiene reglas, todo está sujeto a orden, puede que no conozcamos aún algunas leyes que rigen nuestra vida cotidiana. De eso trata la ciencia, de escudriñar las leyes que determinan la naturaleza. Y no podemos declarar que nos rebelamos contra las leyes de la naturaleza, …a partir de hoy decido estar en contra de la ley de la gravedad. No. Y hay acuerdos establecidos para todo, hasta para el lenguaje y la escritura, Tita.

Y dónde ensayaremos cuando haya que hacerlo? Se supone que ya no podemos hacerlo en el TUNI, porque para la directiva actual yo ya no tengo nada que hacer allí. Arrividerchi, chau, good bye chocheras. (Los espero en mi casa mañana viernes, a partir de las 7pm. seguro puedo compartir con uds. un coctelito, de esos que ya saben, je je)

A. Mego

14 de MAYO 2009